No te dejes liar por los anuncios
Escribe en el papel o en la pantalla
Dile a alguien que conoces o no
cuánto importa contar lo que sucede
en la casa de células que somos.
Y lo lees en voz alta, participa,
cuando nos toque vernos en la plaza.
Y lo lees en voz baja, busca y ama,
en donde anida, al fin, lo venidero.
No pienses en tu edad o tu experiencia.
No creas que no puedes. Que no sabes.